LOS
CUIDADORES DE PERSONAS EN SITUACIÓN DE DISCAPACIDAD
Somos muchas
las personas que asumimos el papel de cuidadores, bien sea porque las personas
que cuidamos nacen con alguna discapacidad o la adquieren a través de su vida,
por enfermedad, un accidente o cualquier otra razón.
Podemos
hacerlo con entusiasmo o simplemente porque nos toca o porque hace parte de un
trabajo que debemos desarrollar. Por
amor o sin él, con ganas de que salgan adelante las personas que cuidamos o
porque solo cuidan sus funciones vitales como comer, dormir, entre otras, pero
siempre asumiendo responsabilidades propias y ajenas.
Si este
cuidado no lo hacen personas contratadas para la persona en situación de discapacidad,
lo más probable es que esta labor sea realizada por los padres, hermanos o
parientes cercanos, los cuales en muchas ocasiones no tiene retribución
económica por su labor, se les dificulta su vida personal ya que le es difícil
cuidarse a sí mismos, tener ratos de descanso o de ocio y ni pensar en su parte
intelectual que queda relegada.
Sería muy
agradable que estas personas sean tenidas muy en cuenta por el resto de los
familiares de las personas en situación de discapacidad, que aprendieran un
oficio y lo pudieran desarrollar, que se les permitieran su entretenimiento y
de este modo salir de la rutina y pensar en otras cosas, para continuar con su
labor de cuidadores.
Las personas
que desempeñan la función de cuidadores deben ser seres dignos de que se tengan
en cuenta sus necesidades y sus gustos para darles espacios de descanso y
esparcimiento que permitan hacer una pausa efectiva de su labor cotidiana. En
este rol se pospone su proyecto de vida, la disponibilidad de ellas debe ser
todo el tiempo y hasta puede generarles problemas de salud física y mental.
Es necesario
en muchos casos que los cuidadores aprendan a realizar terapias y tratamiento
para sacar adelante en sus procesos individuales y mejorar su calidad de vida
de las personas que atienden. En la
mayoría de los casos facilitan la realización de actividades cotidianas como
los traslados dentro y fuera del hogar, a una visita o ir a una cita médica y
en algunos casos administrar su bienes materiales, entre otras.
De todas
formas los cuidadores aprendemos prácticamente por ensayo y error, estudiando o
no el tema de la discapacidad con que interactuamos, pero de todas formas para
lograr hacer adecuadamente nuestra labor debemos hacerlo con amor y entrega y
respetando al otro como una persona digna.
Con estos
argumentos TQM CREATIVO quiere
dignificar la labor diaria de dedicación y entrega de los cuidadores de las
personas en situación de discapacidad.