POR QUE SIEMPRE TE VES FELÍZ
La cita estaba
planteada desde finales de 2018, pero solo se pudo concretar luego del reinicio
de ensayos del Teatro el grupo, por falta de sede, a mediados de febrero.
Al llegar al sitio
de ensayos, se escuchaba tras las puertas que comentaban acerca de una escena
nueva de “crónicas de soledad”. Luego de terminar el ensayo me permitieron
entrar y les pedí que hiciéramos un circulo para facilitar la conversación.
Les dije que
quería escuchar las opiniones acerca de la percepción, errada en mi concepto de
que “los jóvenes con discapacidad están siempre felices”. Quería comprobar el
paradigma de la eterna felicidad de los jóvenes con discapacidad intelectual.
La pregunta
inicial fue “Por qué siempre te ves feliz?” y a continuación resalto lo más
importante que expresó cada uno de los muchachos.
Empiezo con Sara, quien expresó "Por poder ensayar con mis amigos en teatro".
Sofía, la nueva integrante estaba juagada en
sudor por el calor que había aguantado en su primer día de ensayo de teatro con
“crónicas de soledad”, se había dado cuenta de que el calor macondiano, se
podía sentir en este sitio. La respuesta dada por ella con todo su esfuerzo, por
la limitante que tiene por su parálisis cerebral, fue “Por qué Dios me ama, soy feliz”.
Todos sus
compañeros, la apoyaron con un “eso” en coro.
Carlos,
tiene su turno y expresa que él se siente feliz por el amor que siente por Sara,
su novia y por formar parte del grupo de teatro.
Sofia dijo “soy feliz en teatro, con mis
compañeros”.
Estefanía, habiendo
escuchado lo dicho por sus compañeros, afirmó “algunas veces soy feliz, como
cuando estoy ensayando con el teatro o en las presentaciones. Pero algunas
veces no soy feliz porque me pongo a pensar cosas en mi cabeza, asuntos
personales, que me remueven”.
Felipe, dijo “soy
feliz porque la vida es maravillosa, el compartir con todos en el teatro. Cuando
a veces me enojo, me pongo triste y dejo de ser feliz”. Se forma una algarabía
al escuchar lo del enojo, con risas y palabras de consenso al reconocer que
esta es una característica de los artistas de este grupo de teatro.
Cesar, afirmó “Por
mis amigos, cuando estudiamos los textos, soy feliz. Me encanta hablar con
ellos, hacerme entender todos los días más”.
Le corresponde el
turno a Sara Tejada, y dijo que es feliz “porque amo lo que hago, también en mi casa
porque allí están mis motores y guías (sus padres)". Al socializar el término
“motores”, aparece en el diálogo de los muchachos, que conocen otros ejemplos
para reforzar esta idea, como la directora del grupo de teatro, un hermano, la
abuela, entre otros.
Natalia, expresa que se siente feliz al estudiar con todo el grupo los diferentes textos, compartir en los viajes y en las funciones de teatro.
José Pablo,
con su tono pausado que lo caracteriza afirma, “soy feliz interpretando a García
Márquez, escribiendo mis ideas y mi motor es el computador (en sentido
figurado)”.
Paulina, “me
encanta cantar y ser actriz. Cantar para mí las canciones que me gustan y
bailarlas”.
Cuando le toca el
turno a Carlos Santiago, dice “me siento 100 % feliz haciendo teatro,
con la familia que tengo, y mi novia.
Tengo muchos motores y a mi directora la
amo con toda mi alma, como a mi novia que también es actriz y está a mi lado".
Por su parte a Habeidy afirma, “mi familia me hace feliz, ser la persona que soy me hace feliz.
Cuando le paso algo a mi familia no soy feliz”.
Jhonatan, que
se mostraba ansioso por hablar, dijo “con mis amigos y amigas de teatro me
siento feliz, con mis padres”, es tanta la emoción al expresar que se le
dificulta hacerlo. No lo hace feliz que lo traten como niño, y todos reaccionan apoyando ese argumento.
Beatriz Duque, la
directora del grupo de teatro, los conoce a todos y se da cuenta, con el solo
saludo, cuando a alguno de los muchachos les pasa algo personal que los afecta
al momento de llegar a los ensayos, algunos cuentan, otros se quedan callados,
pero todos lo manifiestan de alguna manera, como cualquier persona, por alguna
discusión, por el tiempo de transporte, etc. Afirma, no siempre se ven felices,
pero son personas felices.
Fue una charla
muy entretenida y enriquecedora, ojalá se pueda repetir pronto para tratar con
ellos otro de los temas que me llama la atención.
VICTOR HUGO TEJADA ARENAS